La ciudadanía donostiarra respondió al llamamiento de este fin de semana y participó con la ong donostiarra comprando los productos de segunda mano que se pusieron a la venta el sábado en el mercadillo DonostiaTruk, y el domingo en el mercadillo del festival Glad is the day. Todo lo recaudado irá destinado las familias ucranianas que huyeron de la guerra que viven entre nosotros a las que la asociación Guk Ucrania está ayudando.

A las diez de la mañana abrió sus puertas el mercadillo Donostiatruk organizado por el Departamento de Medio Ambiente del ayuntamiento de Donostia/San Sebastián. Las personas voluntarias de la ong Guk Ucrania ya habían colocado en el puesto asignado las prendas de segunda mano, bisutería y objetos de decoración donados por particulares y puestos a la venta con el objetivo de recaudar fondos para la asociación. Las ventas se produjeron desde el primer momento y las personas que adquirieron algún artículo mostraron su interés por el trabajo de la ong y se llevaron una tarjeta con información sobre Guk Ucrania. La visita más emotiva fue la de las familias a las que la asociación está ayudando, que hicieron acto de presencia para comprobar in situ el trabajo del grupo a la hora de recaudar fondos. Las ventas no pararon en ningún momento hasta que a las dos de la tarde el mercadillo finalizó.

El domingo la cita fue en el Mercadabadillo, el mercadillo organizado en el marco del festival Glad is the Day de la mano del Dabadaba, que se llevó a cabo en Cristina Enea. El puesto de Guk Ucrania volvió a llenarse de productos de segunda mano y durante todo el día no dejaron de producirse las ventas en un ambiente festivo inmejorable. Lo recaudado en los dos mercadillos servirá a la asociación para continuar con sus labores de apoyo a las familias ucranianas refugiadas que viven entre nosotros.

Desde Guk Ucrania se quiere lanzar un sincero agradecimiento a las personas y entidades que han colaborado con el evento: Pasaia Comunicación, Rotulgraf, Komari y Copylaser. También a las personas que donaron material de segunda mano para ponerlo a la venta, así como a la ciudadanía donostiarra que con sus adquisiciones puso su granito de arena para ayudar a las familias ucranianas.